Porque nos quieren dóciles y sumisos. Porque no aceptan más ideas que las suyas. Porque dudar de ellos es ser subversivo y problemático. Porque es más fácil cerrar (o privatizar) que gestionar. Porque hay que seguir su doctrina para ser buen ciudadano. Porque sólo saben distinguir blancos y negros: o estás con ellos o contra ellos…
Nosotros queremos libertad de expresión. Escuchar y debatir. Aceptar otras propuestas, otros puntos de vista. Una sociedad que se construya sobre valores, arte, cultura, convivencia. Donde nadie sea más que nadie por su cuna, ni nadie sea menos por sus ideas y opiniones. Queremos teatros, música, cine, danza y todo el crisol de artes culturales y escénicas que enriquezcan nuestro alma. Nuestro espíritu. Lo que nos hace humanos… y libres.
Para todos aquellos que salísteis ayer a las calles madrileñas en defensa de la cultura. Para toda la gente que dedica su tiempo y su labor en trabajar en asociaciones. Para todos los que lucháis en defensa del patrimonio y de lo que es de todos.
Para tod@s vosotr@s, este magnífico corto de Cristina Cardín.
Isra Calzado López 