Pues sí, pues sí… que esto del cine es como una droga, que uno dice que ya no más pero al cabo del tiempo vuelve a caer. Lo confieso, soy un yonqui.
Café solo es un proyecto pequeñito, que sin embargo lleva mucho tiempo, dos años, fraguándose. Y aunque en principio lo iba a afrontar como director en solitario, las magníficas ideas que ha ido aportando Mariam Useros Barrero desde el primer borrador de guion hasta el último ensayo con los actores me han hecho animarla a que trabajemos de nuevo a cuatro manos.
¡Pero solo en el capítulo de la dirección! Porque el cine es una labor de equipo, y ahí está de nuevo la gente de BAIDEFEIS Producciones arrimando el hombro desde el primer minuto y que, estoy seguiro, volverán a responder como grandes profesionales.
Y por último, pero no menos importate, bienvenidos Vida Mengual y Antonio Ibáñez, flamantes fichajes para encarnar a la pareja protagonista, que, de manera algo inconsciente (al fin y al cabo, todos los demás ya me tienen calado y saben de qué pie cojeo), no han dudado en sumarse al proyecto y ponerse en mis manos. ¡Incautos! 😉
Poco más puedo contar sobre este proyecto: primero, para no gafarlo (y eso que ya sabéis que no soy supersticioso, porque da mala suerte); segundo, porque el guion es tan breve que en cuanto diga algo os chafo el final. Así que… tendréis que esperar al estreno!
Toquemos madera.
Hagamos cine.
Como se viene diciendo en teatro, ¡mucha mierda!