La admirable trayectoria profesional y el impresionante documento gráfico de algunos de los sucesos históricos que construyeron el último cuarto del siglo XX son las dos bazas principales de este documental que, a través de la mirada del maestro Sebastião Salgado, nos lleva por diferentes lugares del planeta -Rwanda, América del Sur, el Círculo Polar Ártico, Níger, Croacia…- .
Sin embargo, y a pesar de que como crónica histórica y periodística resulta de lo más apabullante, La sal de la tierra (Wim Wenders & Juliano Ribeiro Salgado, 2014) es un documental más biográfico que fotográfico donde, paradójicamente, la fotografía -como arte- queda relegada a un segundo plano y apenas nos desvela nada de la personalidad del hombre detrás de la cámara… [leer crítica en Cultura En Guada]