Lo admito abiertamente: me lo he pasado muy requetebién con Jurassic World (Colin Trevorrow, 2015). Y mira que después de los tibios resultados de El mundo perdido. Jurassic Park (Steven Spielberg, 1997) y Jurassic Park III (Joe Johnston, 2001), regresar a Isla Nublar podría dar bastante pereza…
Bueno, pues nada de eso. La cinta es entretenida, espectacular, intensa y por momentos emocionante, a la altura (en algunos conceptos, incluso superior) del clásico original de 1993… [leer crítica en Cultura En Guada]