Empezó en un andamio, luego se puso a estudiar interpretación y, cuando quiso darse cuenta, resulta que estaba en un planeta la mar de raro poblada por sioux gigantes de piel azul. Sam Worthington lo podía haber petado gracias a ‘Avatar’ y a ‘Terminator Salvation’, sus dos taquillazos de 2009. Luego tuvo unas cuantas oportunidades más, pero la cosa se ha ido desinflando poco a poco. ¿Qué ha sido de este actor australiano?