Hablé por primera vez de ‘Cuerdas’ hace tres años, cuando su director, mi admirado amigo Pedro Solís, decidió que yo debía ser uno de los poquísimos privilegiados que vería su segundo corto mucho antes de que saliera a la luz, y ya entonces vaticiné que este trabajo llegaría muy lejos. Después llegarían el estreno oficial en Guadalajara y el Goya, y mi intuición se confirmó con aquella viralidad no deseada con miles de copias ilegítimas y de pésima calidad circulando libremente por la red. Pero la bola de nieve sólo había empezado a rodar y, aunque el mensaje de ‘Cuerdas’ era -y sigue siendo- tan bello como universal, incluso a los más optimistas nos sigue sorprendiendo las metas que ha ido superando esta preciosa historia.

Al cumplirse dos años del lanzamiento de ‘Cuerdas’, invité a Pedro a una charla y unos vinos para una entrevista para Cultura En Guada en la que ya hacíamos un balance casi definitivo, pues es raro que una obra de estas características se mantenga en el circuito festivalero durante tanto tiempo. Presuponíamos entonces que ya encaraba la recta final, y no solo sorprendían sus 170 galardones internacionales, sino el hecho de encontrar fácilmente en internet decenas de vídeos en imagen real realizados por chavales de todos los rincones del mundo que se habían inspirado en ‘Cuerdas’ para lanzarse a hacer sus primeros cortos amateurs.
«A este paso, acabarás en el Guinness», le espetaba off-the-record, algo que él, claro, se tomaba a guasa. Ahora resulta que es una realidad: superados de largo los dos centenares de premios, ‘Cuerdas’ ha entrado, por méritos propios, en el universalmente conocido Libro de los Récords como cortometraje de animación más premiado de todos los tiempos. Un mérito que hay que hacer extensivo no solo al realizador, que es quien siempre pone la cara y se lleva los laureles, sino a todo el equipo de artistas, técnicos y animadores que dedicó muchas horas de su tiempo libre a realizar esta pequeña gran obra maestra, así como a Nora Marco Alario, con quien compartí algunas de las primeras -y más humildes- proyecciones por la provincia, y que es la persona que ha llevado todo el peso de la distribución de la película.

Llegados a este punto, ¿qué más metas podrían superar la pizpireta María y el risueño Nicolás, los protagonistas de ‘Cuedas’? Tras más de un año de trabajo -algo que al principio hacía «para ver qué salía»– , Pedro ya tiene preparado el guion de la adaptación a largometraje. Lo que venga, a partir de ahora, solo puede ser espectacular.
Entrevista con Pedro Solís en EsRadio Guadalajara (21/10/16)