¿Quién no recuera los añorados, venerados y queridos videoclubs? Para toda una generación, fueron nuestros templos que alimentaban nuestro hambre cinéfilo, donde el gourmet clásico, el empacho mainstream y admiradas delicatessen -entonces vilipendiadas, aunque nosotros las defendiéramos sabedores de que el tiempo las convertiría en obras de culto- componían eclécticos menús audiovisuales con todo tipo de propuestas, géneros y nacionalidades.
Hoy, el visionado on-line a demanda y la TV de pago han arrinconado estos establecimientos hasta prácticamente su extinción. Àlam Raja dirige a Nacho Vigalondo (as himself) y a Álex O’Dogherty en esta simpática comedia que destila complicidad y nostalgia por los cuatro costados. ¿Podría existir hoy día un ‘Videoclub’ que te ofreciese todo el cine que siempre quisiste ver?