#BlogosDeOro 2018: Análisis de los baratometrajes finalistas

Ya estamos en la recta final de la quinta edición de los Blogos de Oro, los premios virtuales que eligen y entregan casi doscientos blogueros de cine. Un jurado del que tengo el honor de formar parte desde su segunda convocatoria y cuya gala (tuitera) de este 2018 se celebrará* con la presencia, ya confirmada, de nombres tan destacados como Anna Castillo, Leticia Dolera, Lucía Jiménez, Macarena Gómez o Jaime Ordóñez.

Cerrados y entregados ya los votos de los académicos, es momento de hacer repaso de algunas de las categorías más destacadas y especiales de estos premios. Vamos hoy, en este primer avance, con los llamados baratometrajes: Dice mi buen colega y amigo Ramón Bernadó que estas producciones independientes “caen simpáticas por principios”, y que por ello, a la hora de analizarlas y comentarlas, “se suele ser más indulgente y generoso”. Partiendo de ese principio con el que estoy de acuerdo, debo decir que en esta edición, más que en otras anteriores -al menos que yo recuerde-, hay propuestas que confunden el término independiente con aficionado. Y mientras las primeras son obras que, a pesar de su evidente economía de medios y sus protagonistas alejados del star-system patrio, tienen una factura más que cuidada y unos planteamientos narrativos osados y valientes, las segundas no pasan de ser piezas excesivamente amateurs que difícilmente pasarían el corte en un festival de nivel medio. Ejemplos de ambos extremos encontramos en la categoría que hoy nos ocupa.

‘La mano invisible’ o la performance de la explotación laboral.

Ejemplo perfecto de lo que puede ser una gran película independiente: once actores -algunos de ellos, rostros conocidos como Josean Bengoetxea, Bárbara Santa Cruz, Daniel Pérez Prada o Marina Salas, entre otros-, apenas cinco escenarios y una parábola demoledora sobre los límites de la dignidad en el trabajo. Si te contratan para que hagas tu oficio ante el público en un teatro alternativo, fíate tú de las condiciones laborales -que pueden cambiar arbitrariamente de la noche a la mañana- o del compañero (desconocido) que tienes al lado. Y, a todo esto, frente a la mirada inquisitiva de unos espectadores que se creen con derecho a todo por haber adquirido una entrada… gratis. Como en ‘El experimento’ (Oliver Hirschbiegel, 2001), un entorno cerrado y un par de normas estrictas son ingredientes suficientes para explotar y retorcer los límites de la moral, tanto del individuo como masa social. Quizá la cinta no sea del todo redonda, pero su potencial es tan demoledor, su realización tan bien cuidada y sus actores y actrices están tan bien afinados, que deja un fantástico sabor de boca.

‘Dhogs’: Esto no es un juego.

Si perversa es la mirada que David Macián hace sobre nuestra sociedad laboral actual, mucho más negra y desgarradora es la lupa que sitúa Andrés Goteira sobre ‘Dhogs’. Con un planteamiento visual y escénico tan rompedor como desconcertante -durante gran parte del metraje, uno no sabe si está viendo una película, una obra de teatro o qué- y una (falsa) división por episodios, la cinta, de visionado nada fácil por su complejo subtexto y su terrible y antiestético sentido de la violencia, se revela como un terrorífico cuento para adultos que nos muestra, quizá con excesivos recovecos, nuestro innato voyerismo ante las más cruentas atrocidades, así como nuestras más oscuras fantasías si nos dieran la oportunidad de participar en ellas. Si alguna vez has jugado a un simulador de coches y por diversión te has lanzado contra los peatones, esta peli te hará reflexionar. Como pega, le encuentro alguna subtrama fuera de contexto -no termino de pillar lo del taxista-, pero, por otro lado, nos ofrece una de las interpretaciones femeninas más brillantes de la temporada: Melania Cruz, de quien me considero fan desde ya.

‘La vida y nada más’: Salir del hoyo.

Dos propuestas llegan este año a la categoría desde los Estados Unidos. Antonio Méndez Esparza firma este retrato sobrio y austero sobre la difícil pubertad de su protagonista, un joven afroamericano criado en una familia desestructurada -su padre está en la cárcel, su madre lucha por sacar adelante a sus dos hijos con trabajos mal pagados- en un entorno hostil y opresivo. Durante gran parte de la película, uno tiene la impresión de que el título le viene al pelo, ya que muchas situaciones son tan rutinarias como aparentemente arbitrarias. Pero en seguida uno se da cuenta de que todo está guionizado y planificado, y aunque los actores -todos y cada uno de ellos- están maravillosos, quizá al final nos deje una sensación algo vacía, como que no termina de llegar al meollo de la cuestión. Puede que también le pese, por cercanía en el tiempo, que aún tengamos muy presente la oscarizada ‘Moonlight’ con la que, trasfondo sexual aparte, guarda no poco parentesco.

‘Ekaj’: Bocados de realidad

Vamos a los dos casos que, particularmente, considero de cine aficionado. A ‘Ekaj’, un fresco por momentos espontaneo y naturalista sobre la difícil vida en el submundo de Manhattan, no le pierde su llamativa carencia de medios técnicos -evidente en la calidad de la imagen incluso para un no experto-, sino la vacuidad de su no-historia o no-trama. Retratar el día a día de un joven chapero con innegable fotogenia andrógina –Jake Mestre– puede ser interesante como experimento sociológico, y es en sus escenas de calle donde la cinta gana puntos al no quedar claro si estamos ante una obra de ficción, un documental, un ejercicio biográfico o qué. Pero son los momentos coreografiados -las peleas, la violación- donde la película se cae irremediablemente, con unas interpretaciones forzadas, planificación simplona y montaje torpe.

‘Verano rojo’: Casquería mallorquina

Claro que si ‘Ekaj’ nos deja el sabor amargo de lo que pudo haber sido y no fue, lo de ‘Verano rojo’ no tiene nombre. Nada hay peor, y más en una cinta de género, que saber de antemano todo el desarrollo y final de la película a los cinco minutos de comenzar la proyección. Puedo superar un reparto de tercera regional -que bastante hace con unos personajes de trazo grueso que sobrepasan el término cliché-, puedo hacerme el loco y mirar hacia otro lado cuando conceptos como raccord o etalonaje parecen términos desconocidos para los responsables -o, lo que sería peor, los conocen pero los han obviado deliveradamente-, pero ante la falta de más y mejores mimbres, ¿no podían al menos haberse trabajado el guion para ofrecer algo más que una concatenación de personajes, escenarios y tópicos mil y una veces vistos en el slasher cutre de las últimas cuatro décadas? Está todo tan manido, tan trillado… y ese supuestamente sorprendente giro final -con embutido local de por medio- resulta evidente desde la escena de la tienda de ultramarinos. Por cierto, ¿qué opinarán de ‘Verano rojo’ la Conselleria de Cultura y el Consejo Regulador D.O. Sobrasada de Mallorca? Sinceramente, no creo que les haya hecho mucha gracia.

*Los Blogos de Oro 2018 se darán a conocer el domingo 25 de marzo a partir de las 17h00 en twitter a través de la cuenta https://twitter.com/BlogosDeOro, el hashtag #BlogosDeOro.

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#BlogosDeOro 2017: Análisis de los cortos finalistas

Fotomontaje y grafismo: #BlogosDeOro

Este año, he decidido dedicar sendos posts tanto a los cortometrajes como a los baratometrajes que han llegado a la finalísima de la cuarta edición de los #BlogosDeOro*, a fin de que, al menos desde este humilde rincón digital, podáis conocerlos o, al menos, que sus títulos os vayan sonando. Eso sí, me he autoimpuesto una condición: dado que soy parte del numeroso jurado que otorga estos reconocimientos -virtuales, pero muy divertidos, a través de Twitter- , publico estas opiniones completamente subjetivas una vez ya se ha cerrado el período de votaciones para no condicionar la opinión de cualquier compañero bloguero o que, entrando a debate, alguno me haga replantearme mi criterio.

Y así, hoy os hablaré de lo que me han parecido los cinco cortos finalistas, un repóquer de lo más ecléctico y variopinto que va del slasher a la distopía futurista, pasando por el drama social, la exploración espacial y los fantasmas de la guerra:

‘Leica Story’, de Raúl Mancilla

Robert Capa podría ser el protagonista de esta historia rural ambientada en la Andalucía de los primeros años de la posguerra, en la que no faltan atormentados fantasmas (reales y metafóricos) y que cuenta con algunos nombres conocidos en el elenco, como Mark Schardan (‘Palmeras en la nieve’) o el polifacético Pedro Casablanc (‘B. La película’). Por sí mismos, todos los elementos de esta película funcionan, pero no llegan a armonizarse completamente con un planteamiento interesante pero un desarrollo que tira de algunos clichés demasiado trillados en el género. Sin embargo, no deja de ser un trabajo curioso. Lo mejor: Una cuidada ambientación y diseño de producción. Lo peor: Como cuento con espíritus no aporta demasiada novedad. [Ir a la web oficial]

‘Mañana’, de Manuel Aguilar

Con apenas unos pocos mimbres -un par de escenarios dentro de una casa, una pareja de actores con estupenda química-, Aguilar sacude nuestras conciencias al retratar, con toda su crudeza, la terrible pesadilla de aislamiento, soledad y muerte que sufre, en un fatídico día cualquiera, un matrimonio de mayores, con ella tetrapléjica y postrada en la cama. Del amor a la agonía en apenas unos pocos minutos en un relato tan verosímil como estremecedor, aunque -por ponerle un pero- demasiado previsible en los momentos más climáticos. Lo mejor: Klara Badiola, dolorosamente inconmensurable. Lo peor: Me falta más denuncia social -o, al menos, más explícita-, lo que puede hacer que el espectador se quede en el suceso puntual y anecdótico sin profundizar en el subtexto. [Ir a la web oficial]

‘Sputnik’, de Vicente Bonet

La improbable, casual, bella y efímera historia de amistad por radio entre dos personajes que nunca se verán las caras -un cosmonauta soviético y una vivaracha niña americana- en los albores de la carrera espacial del siglo XX convierte ‘Sputnik’ en una de las obras más optimistas y luminosas de Vicente Bonet, un veterano del cortometraje con algunos títulos ya conocidos a sus espaldas y que vuelve al terreno de la ciencia-ficción -esta vez, desde un prisma más realista y menos friki- cuatro años después de su exitoso ‘Love Wars’ (2012). Quizá no sea un trabajo redondo, pero su moraleja humanista, su acertadísimo casting y su notable y cuidada realización visual lo convierten en una de las piezas a tener en cuenta en este y otros certámenes de la temporada. Lo mejor: El buen rollo que transmite, reconciliándonos con lo mejor de la especie humana. Lo peor: El final puede saber a poco… lo cual no tiene que ser necesariamente un defecto. [Ir a la web oficial]

‘You’re Gonna Die Tonight’, de Sergio Morcillo

Vaya por delante que no tengo nada en contra del slasher, ese género de terror tan identificable con la sangre a litros, los crímenes horrendos y los psychokillers dementes y/o enmascarados… pero digamos que no es, precisamente, mi favorito. Este corto tira de un planteamiento sencillo -una llamada anónima, en mitad de la noche, amenazando de muerte a la protagonista- para proponer un macabro juego del gato y el ratón con algún qué otro giro más o menos inesperado. Lo mejor: La opresiva y malsana atmósfera que tanto Morcillo como su directora de fotografía Carmen Quintana han sabido imprimir al film. Lo peor: No hay desarrollo de trama ni de personajes, y el guion se queda en una mera anécdota para concatenar una escena con la siguiente. [Ir a la web oficial]

‘Zona 84’, de Lonan García

Basado en una homónima novela gráfica, nos sitúa en una Barcelona postapocalíptica y militarizada, cuyos habitantes malviven hacinados entre la mugre pagando hasta por el aire embotellado que se respira. Y en medio de tal panorama, hay un individuo que se rebela, dispuesto a todo para huir del estado de sitio. Visualmente es espectacular e impactante, pero narrativamente lo encuentro bastante pobre más allá de su puesta en escena y sus efectos especiales. Si estuviésemos hablando del episodio piloto para una (web)serie o de los primeros quince minutos de un largometraje, mi valoración sería mucho más entusiasta; pero para una obra individual, se me queda muy coja. Lo mejor: Su avasallador nivel de producción y postproducción. Lo peor: Más allá de tópicos y lugares comunes, ¿qué nos cuenta? [Ir a la web oficial]

* La gala virtual de los Blogos de Oro 2017 se celebrará el domingo 26 de marzo a partir de las 17h00 bajo el hashtag #BlogosDeOro.

 

 

Donde dije digo: previa, porra y sensaciones pre-Oscar

oscar2017_nominadosLo dije. Dije que hacía mucho que no seguía los Oscar, una gala de premios que antaño sí que me producía cierta fascinación pero que desde hace bastantes años a esta parte -seguramente, desde que le endiñaron 11 estatuillas, Mejor Película incluída, a ‘El retorno del rey’ AKA ‘El Señor de los Anillos 3’ (Peter Jackson, 2003), igualando el récord de ‘Ben-Hur’ (William Wyler, 1959) y condenando al ostracismo a la sublime ‘Mystic River’ (Clint Eastwood, 2003)-, me produce nula curiosidad, salvo en los puntuales casos de nominados/premiados españoles.

Pero este año, por una vez y sin saber si será precedente, me desdigo a mí mismo y pongo en negro sobre blanco mis opiniones e impresiones sobre películas y candidatos. Dos razones me llevan a ello: una, porque por primera vez en mucho tiempo, he tenido oportunidad de ver todas las cintas favoritas antes de los premios -y es que suele suceder que algunas de ellas se estrenen en nuestras salas bastantes meses después de la gala- ; dos, porque el bueno de Ramón Bernadó me reta en las ondas de EsRadio Guadalajara, a ver quién es capaz de acertar más galardones -al menos, de los considerados importantes-, y no seré yo el que se retire del desafío… 😉

No me detendré demasiado en cada uno de los títulos -algunas impresiones ya las apunté en un post del mes pasado y la mayoría de ellos los he analizado individualmente en sus correspondientes críticas-, pero sí que diré que, como nota general, me ha llamado la atención es que no hay un solo resquicio para la comedia: todas las propuestas son tremendamente dramáticas -cuando no trágicas-, incluso aquellas que vienen con la camiseta del western contemporáneo (‘Comanchería’) o de la ciencia-ficción (‘La llegada’). No me extraña que el mundo se entusiasme con ‘La La Land’, cuyo poso melancólico y agridulce casi parece pecata minuta comparado con sus ocho competidoras…

Dicho lo cual, ahí va mi quiniela:

  • Película: ‘La La Land’.
  • Director: Damien Chazelle (‘La La Land’) -y eso que no me extrañaría que este año hiciesen un ‘Gladiator’* y se lo dieran, por ejemplo, a Mel Gibson (‘Hasta el último hombre’)-.
  • Actor Protagonista: Casey Affleck (‘Manchester frente al mar’) -también veo al Denzel Washington de ‘Fences’-.
  • Actriz Protagonista: Emma Stone (‘La La Land’).
  • Actor de Reparto: Jeff Bridges (‘Comanchería’).
  • Actriz de Reparto: Viola Davis (‘Fences’) -insisto, debería estar nominada como Actriz Protagonista-.
  • Guion Original: Damien Chazelle (‘La La Land’) -y eso que el libreto no es precisamente el fuerte de la película-.
  • Guion Adaptado: Agust Wilson (‘Fences’).
  • Película de Animación: ‘Vaiana’.
  • Largometraje Documental: ‘I am not your negro’.
  • Película de Habla No Inglesa: ‘Toni Erdmann’ (Alemania).
  • Fotografía: Rodrigo Prieto (‘Silencio’).
  • Vestuario: Colleen Atwood (‘Animales fantásticos y dónde encontrarlos’).
  • Montaje: Tom Cross (‘La La Land’).
  • Música Original: Justin Hurwitz (‘La La Land’).
  • Canción: ‘How far I’ll go’, de Lin-Manuel Miranda (‘Vaiana’).
  • Diseño de Producción: David Wasco y Sandy Reynolds-Wasco (‘La La Land’).
  • Maquillaje / Peluquería: Joel Harlow y Richard Alonzo (‘Star Trek: Más allá’).
  • Sound Mixing: David Parker, Christopher Scarabosio y Stuart Wilson (‘Rogue One: Una historia de Star Wars’).
  • Sound Editing: Alan Robert Murray y Bub Asman (‘Sully’).
  • Efectos Visuales: Stephane Ceretti, Richard Bluff, Vincent Cirelli y Paul Corbould (‘Dr. Strange’).
  • Cortometraje de Animación: ‘Piper’.
  • Cortometraje Documental: ‘Watani: My homeland’.
  • Cortometraje de Ficción: ‘Timecode’.

Como habréis adivinado, algunas apuestas están más meditadas que otras. No os engaño: Documentales -largo y corto-, Película de Habla No Inglesa -no he visto ninguna de las cinco- o las correspondientes a Sonido -después de tantos años, sigo sin tener clara la diferencia entre mixing y editing- las he escogido al azar…

A ver si hay suerte y se trae Juanjo Giménez el primer Oscar para un corto español.

El lunes por la mañana -lo siento, estoy muy mayor para pasar la noche en vela- sabremos cuántas he acertado.

* En la edición de 2001, ‘Gladiator’ era la gran favorita y ganaría la gala… pero contra pronóstico, a Ridley Scott le tangaron un Oscar que parecía cantado y que fue a parar a Steven Soderbergh (‘Traffic’).

** Cierro este post compartiendo con vosotros este magnífico montaje de Screen Junkies (en V.O.).

Blogos de Oro 2017: ¡Todo el mundo está invitado!

blogosdeoro2017Ya está en marcha una nueva edición de los Blogos de Oro. La cuarta, para ser más precisos, la tercera consecutiva en la que participo, y la segunda en la que hago doblete… ya que, además de ser (una vez más) miebro de su ecléctico y muy nutrido jurado -ya somos más de ciento sesenta los blogueros que participamos con nuestras votaciones- , uno de mis últimos trabajos, ‘Café solo’, está entre los cuarenta y cinco seleccionados para el premio a Mejor Cortometraje Estrella.

Lo que empezó como una pequeña iniciativa pergeñada y parida por la web Cine de Patio, se ha convertido, en un tiempo récord, en una cita muy esperada y querida por todos los que desde nuestro ámbito íntimo y particular escribimos y compartimos nuestras impresiones cinéfilas, que cada año sigue creciendo en participantes reales y galardones virtuales. A los ya conocidos para largometrajes propios y foráneos, cortos y baratometrajes, se suman este año dos categorías más: una, con varios premios dedicados al mundo de la ficción televisiva -que, en muchos aspectos, hace frente con justicia a las obras pensadas para la gran pantalla- ; otra, para escoger la Mejor Película de Animación, que además viene con doble premio, ya que en ésta puede participar todo el mundo -y no solamente los que ya estamos inscritos como jurados- , sorteándose, entre todos los votantes, un estupendo regalo.

Pero es que la cosa no queda ahí. Este año, además, habrá una lectura de nominados que tendrá lugar en la Antiga Fàbrica Estrella Damm de Barcelona- y que estará presentada por el actor y cómico Víctor Parrado. Todo un acontecimiento al que espero no faltar, no tanto por la candidatura de ‘Café solo’ -veo muy, muy complicado entrar entre los cinco finalistas- sino porque será la excusa perfecta para poder saludar en persona a tantos amigos y amigas que gracias a las redes y a los Blogos de Oro he ido conociendo a lo largo de estos últimos años.

Espero veros a tod@s por allí el próximo 4 de marzo. ¡Y que viva el cine!